Square-Enix sigue apostando a las claras por la nueva portátil de Nintendo. Y es que Nintendo 3DS está siendo el objeto de muchas de las producciones más deseadas de la compañía, como es el caso de este sugerente título musical ambientado en el universo de Final Fantasy.
Bajo el casi impronunciable nombre Theatrhythm Final Fantasy, Square-Enix pretende rendir un tributo a (con permiso de Dragon Quest) su saga más querida y emblemática: Final Fantasy. El título pretende así recoger el legado de los 25 años que lleva ya la serie entre nosotros, si bien lejos de tratarse de un juego de rol en toda regla, el cartucho va a ser un juego musical muy curioso que se asemejará en ciertos aspectos al divertido e hilarante Rhythm Paradise (o Rhythm Heaven). Y después de probar una demo bastante avanzada, el título nos ha dejado una impresión realmente buena.
Historia y Fantasía
Theatrhythm Final Fantasy va a combinar de manera muy sugerente la música con ciertos toques de rol, dando como resultado una jugabilidad que, de terminar cuajando, puede acabar convirtiéndose en un título de una calidad semejante al disfrutado con Dissidia: Final Fantasy pero salvando las distancias y, por supuesto, desde un punto de vista radicalmente diferente.
El cartucho contará de inicio con tres modos de juego principales que estarán englobados dentro de la modalidad Music Play: Series, Challenge y Chaos Shrine. Sin embargo sólo uno de ellos estará habilitado de inicio, el primero de ellos.
De esta forma Series será nuestra primera parada obligatoria. En dicha modalidad se nos irán explicando los pormenores del desarrollo y la mecánica de juego a través de explicaciones en pantalla y pequeños tutoriales prácticos. Aquí encontraremos todos los títulos que serán recogidos en esta recopilación y que, al menos de inicio, estarán todos los episodios de la saga con excepción de aquellos que no sean números “enteros” o spin-offs. Es decir, que a menos que se encuentren ocultos no habrá rastro de Final Fantasy Tactics o Final Fantasy X-2 / FFXIII-2 ni Final Fantasy: Crystal Chronicles, por citar varios ejemplos. Eso sí, ya se han confirmado diversos temas que aparecerán bajo DLC que sí que pertenecerán a otros títulos de la serie, temas que según Square-Enix alcanzarán la friolera de medio centenar.
Asimismo, el cartucho albergará “de serie” desde Final Fantasy I de NES hasta Final Fantasy XIII de PS3 y Xbox 360, lo cual nos parece más que suficiente. Y más teniendo en cuenta que cada uno de estos títulos dará cobijo a cinco temas selectos pertenecientes a su banda sonora original que tendremos que superar. Además la jugabilidad de cada uno de los temas será un tanto diferente, como ahora os explicamos.
Ritmo clásico
De entrada todos los capítulos constarán del mismo esquema y selección musical. Todos contendrán la melodía inicial (Opening), un tema de Batalla (Battle Music Stage), otro de Campo (Field Music Stage), uno más de Secuencias (Event Music Stage) y la melodía final (Ending). Y salvo la canción de introducción y la final, que compartirán la misma jugabilidad (y que podrán incluso saltarse, ya que vendrán a ser como una especie de fases de bonus), el resto serán un tanto diferentes.
La mecánica de juego se basará en ir siguiendo el ritmo y el compás de cada una de las melodías, teniendo que realizar determinadas acciones en la pantalla táctil a través del stylus. Y todo con el objetivo de ir obteniendo la mayor cantidad de notas musicales posible, que nos permitirán ir adquiriendo experiencia para nuestros personajes (de la que más tarde os hablaremos) y desbloqueando numeroso contenido adicional.
La mecánica más sencilla será la que vendrá dada por las citadas melodías de introducción y final del juego. En ellas tendremos simplemente que ir pulsando en el momento justo la pantalla táctil, instante que debe coincidir con la aparición y contacto en pantalla de cada nota musical con el centro del cristal de poder que figurará en imagen. Sin embargo las cosas se complicarán un tanto cuando llegue el turno de interpretar el resto de melodías. En todas ellas será necesario ir cumpliendo cada una de las indicaciones que aparecerán en pantalla sin cesar y que podrán ser de diversa índole: toque rápido en la pantalla táctil, deslizar la stylus en una dirección concreta, tocar y mantener pulsado con el puntero dicha pantalla táctil mientras seguimos una dirección y trayectoria determinadas que irán apareciendo en la imagen…
Pero entonces, ¿cuáles serán las diferencias jugables entre las partituras de Batalla, Campo y Secuencias? Pues que en cada una de ellas el ritmo será muy diferente y las acciones que habrá que ir pertrechando se centrarán en pautas concretas. Así por ejemplo las melodías de Batalla serán más movidas y pondrán a prueba constantemente nuestros reflejos, teniendo que realizar un alto número de toques de pantalla. Y como contrapartida, durante las canciones correspondientes a las Secuencias habrá que ser más hábiles y precisos, ya que éstas introducirán más cortes en los que será necesario mantener el stylus pegado a la pantalla táctil y deslizarlo de un lado para otro en función de lo que vaya sucediendo.
Y no sólo eso, ya que las diferencias plásticas también serán evidentes. De esta forma durante las escenas de campo veremos cómo nuestro personaje paseará tranquilamente por diversos escenarios, mientras que en las escenas de batalla será posible observar a nuestros héroes pelear contra diferentes criaturas para, por fin, asistir a bellas secuencias de vídeo en las melodías correspondientes.
Mucha profundidad
Una de las características que más nos han sorprendido es la profundidad que presentará este atípico juego musical. Y es que si bien de inicio la propuesta podrá parecer muy asequible y desenfadada (que de hecho, así será para los jugadores menos experimentados), aquellos usuarios más veteranos podrán exprimir al máximo este título.
Para empezar, la jugabilidad se irá expandiendo paulatinamente hasta los niveles que nosotros creamos convenientes. De esta forma habrá jugadores que se conformen con terminar las melodías con una tasa aceptable de aciertos, pero seguro que los más expertos querrán completarlas sin fallo y encadenando el mayor número de combos posible. En función de nuestra “performance” seremos congraciados con una puntuación y un número de notas determinados, a lo que se irán sumando un generoso número de recompensas más jugosas.
Así es. Este pequeño cartucho presentará una opción llamada Museum (Museo) en la que iremos almacenando todas nuestras recompensas. Y dichos premios tomarán la forma de nuevas melodías que podremos escuchar cuando queramos, vídeos de una calidad más que aceptable y un buen número de cartas coleccionables ligadas a la serie Final Fantasy que será posible ir guardando en el correspondiente álbum.
Pero habrá más. ¿Recordáis que al comienzo de este artículo os informábamos de que el juego incorporará tres modos de juego, siendo Series el único que permanecerá habilitado de inicio? Bien, pues poco después será posible desbloquear otro más llamado Challenge que, como su propio nombre indica, nos animará a ir batiendo nuestras mejores marcas y puntuaciones.
Pero será el llamado Chaos Shrine el que nos abrirá nuevas posibilidades jugables. Esta modalidad sólo se habilitará recogiendo las extrañas Dark Notes y, al margen de dejarnos interpretar nuevas melodías, dicho modo de juego también permitirá la participación de cuatro jugadores simultáneos, función que puede deparar grandes momentos de diversión.
¡Pero es que aún habrá más! Sí, porque aunque en un principio cada melodía sólo podrá ser superada en un único nivel de dificultad, Basic, más tarde será posible completarlo en modo Expert y, por fin, en Ultimate. Y las diferencias entre unos y otros niveles de dificultad serán bastante sensibles.
Para terminar con este apartado, confirmar que el cartucho será compatible con la función Street Pass de la consola, lo que nos permitirá compartir y recibir determinados ítems y objetos con otros usuarios con los que nos crucemos.
Herencia rolera
El toque RPG vendrá dado por una serie de elementos que se incluirán en la jugabilidad del cartucho. Para empezar, al comienzo de la partida tendremos que escoger a nuestro personaje principal más tres compañeros adicionales, pudiendo elegir entre más de una docena de tipos diferentes entre los que se encontrarán Lightning, Tidus, Squall, Cloud o Cecil. Como veis, estarán los más representativos de cada uno de los episodios. Y mucho ojo porque esta cifra podrá ir subiendo (y mucho) a medida que nos vayamos topando con los cristales de poder (Crystal Shards), que habilitarán nuevos protagonistas.
Unos y otros podrán ser ataviados con diferentes ítems y poderes. Como si de un juego de rol se tratara, tendremos varios huecos donde podremos ir alojando mejoras en su habilidad, dominios de ciertos elementos como el fuego, etc., lo que nos brindará mejores condiciones para afrontar cada una de las melodías. Además todos estos personajes irán subiendo de nivel a medida que superemos cada una de las canciones, lo que mejorará paulatinamente sus atributos y les permitirá ir accediendo a objetos y poderes cada vez más potentes y variados.
La representación tanto de nuestros protagonistas como de los monstruos será en plan Super Deformed, es decir, que todos aparecerán caricaturizados y cabezones, muy del gusto de los nipones. Toda la acción quedará representada en la pantalla superior, mientras que la inferior será la indicada para realizar todas las funciones de control. En función de cada canción y del capítulo de la saga que hayamos escogido asistiremos a un estilo correlativo a dicha entrega de Final Fantasy, por lo que los primeros episodios serán más “sencillotes” desde el punto de vista técnico.
Pero como no podía ser de otra forma, el gran protagonista de Theatrhythm Final Fantasy será el apartado musical. Sin contar las melodías que servirán como tutoriales, de inicio el cartucho nos permitirá escuchar más de 70 piezas extraídas del universo Final Fantasy. Pero creednos si os decimos que esa cifra crecerá significativamente conforme avancemos.
La calidad de todas estas partituras será magnífica, algo que hemos podido constatar ya que durante nuestra sesión de juego teníamos conectados unos auriculares a la consola. Y el sonido era perfecto, sin ruidos extraños ni problemas de tipo alguno. Y en cuanto a la selección de cada una de ellas, ya sabéis que en estos casos siempre es cuestión de gustos, pero lo que no cabe duda es que Square-Enix pretende satisfacer a los fans más acérrimos de la serie, por lo que podremos encontrar muchos de los temas más insignes de la colosal historia de Final Fantasy.
No sabíamos muy bien qué esperar de este extraño y original experimento de Square-Enix relativo a su saga Final Fantasy pero, después de probarlo, nos hemos quedado realmente enamorados de su propuesta. Y es que la combinación entre la vertiente musical y los toques de rol más el inconfundible y evocador universo Final Fantasy tiene todas las papeletas de acabar siendo una mezcla realmente sugerente para todos los usuarios en general… e imprescindible para los fans de la serie de Square-Enix en particular. Esperamos que así sea.