A estas alturas, resulta evidente la enorme influencia del anime en The Matrix, una obra maestra de la ciencia ficción que transformó el cine y la cultura pop en 1999. Dirigida por las hermanas Wachowski, The Matrix no solo exploraba temas filosóficos y existenciales, sino que también trajo al cine de acción un estilo visual único. A estas alturas todo el mundo aomprende la inspiración directa en el mundo del anime en The Matrix. Sin embargo, durante su producción ni siquiera el protagonista Keanu Reeves tenía clara esta relación. Pero las directoras de la película, las hermanas Wachowski tenían la solución: dos animes imprescindibles.
Según comenta The Hollywood Reporter, Akira y Ghost in the Shell fueron las recomendaciones de las creadoras de The Matrix a su actor protagonista.
"Estaba viendo anime en el canal 79, y ni siquiera sabía qué era. Y luego, cuando trabajé con las Wachowski en The Matrix, me dijeron: ‘Tienes que ver esto’".
Akira es una película recolucionaria dirigida por Katsuhiro Otomo en 1988. Esta obra clave de la animación japonesa y del cyberpunk sigue a Kaneda y Tetsuo en una distópica Neo-Tokyo. La historia, llena de violencia y conspiraciones, explora cómo un individuo puede verse atrapado entre poderes que van más allá de su comprensión, un concepto clave para Neo, el protagonista de The Matrix. Al igual que Tetsuo, Neo descubre habilidades y un propósito oculto en un sistema que parece manipular su destino. Reeves comprendió así mejor las tensiones y las luchas internas que su personaje viviría dentro de la simulación de la Matrix.
Después de Akira, el siguiente paso para Reeves fue Ghost in the Shell de Mamoru Oshii, estrenada en 1995. En esta historia, Motoko Kusanagi, una cyborg con un rol de seguridad pública, busca respuestas sobre su identidad en un mundo donde lo natural y lo artificial están totalmente fusionados. Las Wachowski tomaron directamente ideas visuales y temáticas de este anime para construir el viaje de Neo, quien también se encuentra entre una realidad física y una digital, enfrentando la pregunta de qué significa ser humano en un universo dominado por máquinas.
De Japón, para el mundo
La influencia de estos animes en The Matrix también se percibe en su estética innovadora. El "tiempo bala", un efecto visual en el que el tiempo parece ralentizarse mientras la cámara se mueve a velocidad normal, fue inspirado en la fluidez y la intensidad visual de Akira y Ghost in the Shell. Reeves, tras ver ambas películas, entendió cómo debía proyectar las emociones de Neo, especialmente cuando enfrenta los límites de la realidad, además de familiarizarse con la estética e identidad visual buscada por las directoras.
The Matrix no solo cimentó a Keanu Reeves como un héroe de ciencia ficción, sino que también expandió y reforzó ante un público mayoritario la popularidad del anime en Occidente. Hoy puedes ver las películas de la saga The Matrix en Prime Video, Movistar+ y Max.
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