Presentada por un senador republicano, la iniciativa suma el beneplácito de colegas demócratas.
Muy mal se están poniendo las cosas para las cajas de botín en Estados Unidos, al menos en aquellas cuyas ganancias llegan especialmente de los públicos más jóvenes. Y es que según informa la prensa del país norteamericano, el proyecto de ley para prohibir las loot box para menores de edad presentado por un senador republicano avanza a buen ritmo y gana apoyos entre los políticos de la bancada demócrata.
"Solo una economía de adicción puede producir un modelo de negocio basado en llevar un casino a las casas de cada niño estadounidense con el objetivo de engancharlos desesperadamente", expone, en palabras recogidas por Variety, el republicano promotor de esta iniciativa Josh Hawley. "Estoy orgulloso de este acuerdo, una legislación bipartidista para poner fin a estas prácticas de explotación", añade.
"El congreso debería mandar un mensaje claro a los desarrolladores de aplicaciones y compañías de tecnología: los niños no son vacas de dinero que ordeñar en busca de ganancias", comentaba en este sentido Richard Blumenthal, un senador del Partido Demócrata que, junto a su compañera de filas Maggie Hassan ha decidido dar un paso al frente y apoyar el proyecto del político republicano Hawley.
Desde la ESA, la patronal del sector de los videojuegos en Estados Unidos, han calificado este proyecto de ley como "defectuoso y plagado de inexactitudes", añadiendo además que su aprobación final sería perjudicial para la experiencia del jugador y podría poner en riesgo más de 220.000 empleos.