Ratchet & Clank supone el excelente debut de la simpática pareja en PlayStation 3. Una aventura que es muy respetuosa con las anteriores entregas, pero que adhiere numerosas fórmulas nuevas para obtener un crisol de géneros muy interesante. Armados hasta los Dientes es fácilmente el mejor juego de cuantos títulos exclusivos han sido lanzados en PlayStation 3 hasta ahora.
UnMetal cumple con éxito la misión de recuperar la esencia de Metal Gear desde una perspectiva paródica, en una aventura que además se siente única, con sus propias virtudes jugables y estéticas.
Bioshock 2 supone el regreso de Rapture y su Gran Cadena, y con ésta una nueva inmersión en las profundas aguas que envuelven a Rapture, y por ende, también en lo más oscuro del ser humano.
Spelunky 2 es la secuela que el clásico de Derek Yu merecía. Más de todo y sin perder ni un ápice de su esencia. Los amantes de un buen desafío van a encontrar un refugio perfecto en este juego en el que hacen falta grandes dosis de paciencia y coordinación, pero la continua sensación de mejora que se obtiene de este gran roguelite merece muchísimo la pena.
Sony está convirtiendo los primeros compases del 2017 en un brutal ejercicio de poder para una PS4 que va extinguiendo poco a poco el habitual reproche a su escaso catálogo.
Dreams acaba de nacer y es solo el principio. Es un motor intuitivo, amigable y con posibilidades infinitas que desdibuja la frontera entre creador y jugador. Su campaña es sencilla, pero desde el punto de vista del creador, casi inalcanzable. Los proyectos de la comunidad, ingeniosos y motivadores.
Owlboy juega con la nostalgia de manera brillante pero, a su vez, apuesta también por la innovación. Recupera la mejor esencia de las aventuras de tiempos pretéritos y le da un nuevo giro que le sienta genial. Acción, plataformas, puzles, exploración ¡y hasta sigilo! De todo hay en este videojuego que sabe cómo sorprender de forma constante.
Uncharted: Drake´s Fortune es un excepcional juego de acción y aventuras que nos devuelve el inmejorable aroma del cine de aventuras de los 80. Plataformas, tiroteos, personajes carismáticos y un hilo argumental francamente bien escrito, esbozan unas 8 horas de campaña realmente buenas.
Sabíamos que nos gustaría, no nos imaginábamos que tanto. Overwatch es uno de los mejores videojuegos de acción multijugador que han pasado por nuestras manos. Por la intensidad de sus tiroteos, por el magistral diseño de sus protagonistas y sobre todo, por su admirable capacidad de sorprenderte una y otra vez.
La generación acaba de echar a andar y puede que estemos ante un auténtico referente. Lo mejor que le puede pasar al género es que Street Fighter V esté a la altura de Xrd. Junto al juego de Capcom y el trato de Sony con los arcade sticks confirma que la lucha va a estar en PlayStation 4 durante la presente generación si no cambia mucho el esquema.
Cuando resulta prácticamente imposible encontrarle pegas a un juego no hay dudas de que este se trata de uno de los grandes. Y Trine 2 lo es, pese haberse lanzado a precio reducido y no contar con una gran campaña publicitaria.
Se ha dejado querer más de la cuenta, saltándose incluso su llegada a Wii que iba a ser su destino inicial, pero os aseguramos que la espera ha merecido la pena. Pikmin 3 es un juego de esos que sólo Nintendo y la sabiduría infinita de Shigeru Miyamoto son capaces de ofrecernos, le duela a quien le duela.
El estudio Fishlabs ha firmado un gran trabajo con su primera producción destinada a los sistemas de juego actuales de sobremesa. Chorus es un shooter espacial muy entretenido, que goza de muy buenas mecánicas y que se deja disfrutar enormemente durante el transcurso de cada batalla.
Mario nos da el título que no pudo ofrecernos en el lanzamiento de Wii U. Un plataformas que marca un nuevo hito en la historia del fontanero al introducir su potente concepto multijugador dentro de una dinámica enteramente tridimensional.
Pese a los nuevos gadgets y desafíos que buscan darle a la acción un soplo de aire fresco, Hitman 3 se siente como un juego tremendamente continuista con todo lo que ello implica.
Trico se convertirá en un personaje inolvidable para la historia de los videojuegos en mayor medida incluso de lo que se recordará a The Last Guardian. El nuevo trabajo de Fumito Ueda tiene todos los elementos que dotan de identidad a las obras anteriores del estudio, pero también tiene algunas de las aristas que habitualmente les quedan sin pulir.
Los seguidores de los juegos de plataformas deberían dar saltos de alegría al comprobar lo que puede suponer Ratchet & Clank para su género predilecto.
Far Cry 5 es un muy buen exponente de lo que quiere conseguir la saga shooter y, seguramente, también de hacia dónde quiere dirigirse. El nuevo videojuego de la serie se hace fuerte en todos los elementos que caracterizan a la marca y, aunque no arriesga demasiado en sus ideas, logra un resultado muy bueno.
The Ballad of Gay Tony recupera el espíritu gamberro e imposible de San Andreas y Vice City, para abandonar las formas y el estilo hondo y dramático de GTA IV y The Lost and Damned. Tremendamente espectacular, con unas ocho horas de juego y con abundantes misiones muy variadas y todas ellas cargadas de emoción y aparatosidad. Una oportunidad inmejorable de visitar una vez más Liberty City.
Titanfall 2 nos ha sorprendido con su campaña, llena de ideas atrevidas y diferentes al shooter cinemático tradicional, mientras ofrece un multijugador más sólido y con más empaque, capaz de ofrecer una mayor versatilidad a medida que progresamos por todos sus niveles.
Han pasado 10 años desde su estreno en Gamecube, pero Wind Waker demuestra con esta remasterización en alta definición, o más bien remake, que ha resistido de maravilla el paso de los años. Su jugabilidad basada en recorrer el mar sigue siendo gratificante, su apartado visual una auténtica delicia y su variedad una de las mejores en toda la historia de Zelda.
Un plataformas de gran variedad, considerable profundidad y elevada duración. Monster Boy y el Reino Maldito es una absoluta sorpresa, un título encantador que brilla por la capacidad de transformación de su protagonista, la cantidad de situaciones que genera y un diseño heredero del esquema metroidvania, combinado con la esencia de la mítica saga Wonder Boy.
Odin Sphere: Leifthrasir es uno de esos remakes, o revisiones, que están más que justificados. Los cambios aplicados a la obra de Vanillaware la llevan a la excelencia, aplicando justo los retoques necesarios para dotar de más ritmo a su atractivo combate y más dinámica a su gestión de recursos.
En definitiva, Treasures of the Aegean combina de forma solvente la resolución de puzles con las plataformas, todo ello, construido sobre una mecánica de bucles temporales con elementos roguelike y una jugabilidad rápida, fluida y satisfactoria.
Eastward llama la atención por su precioso homenaje a la era de los 16 bits, pero realmente te atrapará cuando descubras una narrativa propia de Hayao Miyazaki y una jugabilidad altamente inspirada en los clásicos Zelda. Una aventura de acción que no se hace nada corta, que posee una considerable variedad y que además es bellísimo en sus planos visual y sonoro.
