Gust usa el género JRPG como contenedor para todo el fanservice de Fairy Tail que queramos. Por desgracia, no es capaz de profundizar en los sistemas de juego que propone. Eso nos deja con un videojuego de rol flojo pero que aprueba en satisfacer el apetito del aficionado a la licencia.
Skully no pasará al recuerdo colectivo de jugadores de puzles y plataformas. Sus intenciones son buenas y, por momentos, tiene ideas atractivas. Sin embargo, el diseño de sus escenarios, unos puzles bien ideados pero mal acabados y la falta de rejugabilidad tornan a Skully en un título menor dentro de su género.
Esperaba muchísimo más de este RPG Maker MV. En consola es más fatigoso moverse por los menús y escribir, no se pueden añadir elementos propios externos al juego ni tocar el código, pero a cambio podrás iniciarte en el desarrollo de videojuegos desde tu sofá. Le faltan muchos tutoriales y a veces el juego se queda colgado unos instantes, pero como puerta de entrada al mundo de RPG Maker es suficiente.
Astérix y Obélix XXL Romastered es una revisión del original muy poco ambiciosa. Optimiza los gráficos y la música, y no con demasiada fortuna en su versión para Switch. Ha salido mucho mejor parada en rendimiento y gráficos sus otras versiones. Añade un modo extra de dificultad y un par de nuevas modalidades jugables que alargan sus horas de juego.
Cobra Kai: The Karate Kid Saga Continues es el típico videojuego que, pese a sus limitaciones, se hace entretenido. Sabe compensar una jugabilidad poco efectiva con una óptima forma de mejorar a sus personajes y hacerlos crecer. No es que sea muy fiel a la serie original, pero el pique entre los dojos está bien representado.
The Good Life es una apuesta algo más luminosa por parte del autor de Deadly Premonition, que acarrea todos sus vicios y virtudes: un pequeño pueblo rural que esconde múltiples secretos, lleno de sistemas de juego interesantes.
Actraiser Renaissance podría haber ido más allá, pero cumple como actualización del clásico de SNES. ¿Lo mejor? Que añade un buen puñado de contenidos para incrementar la duración, mientras integra cuantiosas mejoras jugables que profundizan aún más en la sobresaliente combinación entre acción y estrategia que planteaba el Actraiser original.
Tras su exitoso paso por PC, New World Interactive ha trasladado toda la acción tan intensa que nos ofrece su shooter subjetivo a PS4 y Xbox One de manera acertada, siendo uno de los mejores exponentes de su género de los aparecidos en los últimos meses.
Dungeon Encounters no es una experiencia para todo el mundo. Es un videojuego muy experimental que solo es recomendable para los que aman la pureza de un buen combate. Hiroyuki ItÅ se ha atrevido a experimentar, a desnudar hasta el extremo un JRPG y le ha quedado una cosa muy maja, pero a la que falta más pegada.
Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba - The Hinokami Chronicles hace de forma notable lo que prometía hacer: ponerle buenos gráficos y animaciones al manga de Koyoharu Gotoge, pero peca en su ritmo narrativo y no siempre sobresale en lo jugable.
Saber Interactive y Crytek recuperan tres shooters de destacada calidad y que siguen brillando en lo jugable (especialmente los dos últimos). ¿Es suficiente? Claramente no. Gráficamente son muy mejorables e incluso como remasters se quedan lejos de lo que habría significado un trabajo a la altura de la saga FPS.
Disciples: Liberation es un RPG táctico en el que tendrás que tomar muchas decisiones que te van a conducir a distintos finales. Sin embargo, y a pesar de ser un juego muy completo en cuanto a mecánicas y detalles, con un buen número de opciones de diálogo, su extensa duración le acaba pasando factura.
Voice of Cards me ha gustado porque me encanta Yoko Taro y el JRPG es mi perdición. Aprecio mucho cómo entrega el lore y cómo está escrito su personaje principal. También me gusta su puesta en escena y alguna cosa que hace con sus cartas. Sin embargo, creo que tiene problemillas de ritmo, en su combate y en la exploración que no quedan subsanados por la originalidad de su planteamiento.
Sin cambios en lo jugable, el usuario de Just Dance ya solo espera que la selección musical sea acorde a lo que se espera cada año de la saga. Ubisoft ha construido una franquicia de éxito alrededor de la música y son muchos los usuarios que disfrutan de la experiencia desde su primera entrega.
Aunque se echan en falta más opciones a la hora de diseñar los hábitats de los dinosaurios y no es el juego de gestión más complejo en materia económica, Jurassic World Evolution 2 sabe divertir sin importar si eres o no veterano en el género.
No puedo decir que Blue Reflection: Second Light no me haya gustado, porque no es cierto, sí me lo he pasado bien con él. Sin embargo, he de reconocer que hay que hacer muchas concesiones para apreciarlo. Gust sigue teniendo algunos vicios y se excede con la sobreexposición tan sexualizada de sus personajes femeninos. Y eso le quita muchísima fuerza al mensaje del juego.
Es una pena que, ya puestos a reestrenar Skyrim, Bethesda no haya aprovechado la ocasión para añadir aún más mejoras visuales. Habría sido una buena excusa para que todos aquellos que ya se conocen el juego de memoria volvieran a él con más ilusión.
Grand Theft Auto: The Trilogy The Definitive Edition, en realidad, está lejos de muchas cosas. Rockstar se ha quedado lejos de dar el homenaje que sin duda merece el reestreno en fechas tan señaladas como el 20º aniversario de Grand Theft Auto 3, pero también está lejos del desastre que muchos catalogan en redes sociales en los últimos días.
Surviving the Aftermath es un título de construcción de ciudades que mezcla bien elementos de supervivencia, gestión de recursos y eventos emergentes. Su mapa de campaña y el progreso ligado a los especialistas son lo mejor de un juego que puede volverse algo obtuso en algunos momentos por culpa de los cuellos de botella que origina la falta de algunos recursos hacia mitad de la partida.
La forma más sana de entender a Battlefield 2042, de lanzamiento al menos, es verlo como una enorme librería de contenidos y un sandbox tremendamente flexible. Todo eso funciona genial en el editor de experiencias Battlefield Portal, mientras que los nuevos operadores y dinámicas meteorológicas se sienten bien implementados en el modo Hazard Zone.
Asterix & Obelix: Slap Them All no me ha parecido un mal beat 'em up, pero sí un videojuego con bastantes carencias jugables y que, sobre todo, presenta una acusada sensación de repetición. Afortunadamente, los fans de la pareja gala encontrarán aquí un título absolutamente fiel a la licencia y que visualmente es una delicia.
Que Beyond a Steel Sky llegue a consolas tras su lanzamiento el año pasado en PC es una buena noticia. Los puntos menos positivos como el sistema de conversaciones simplificado siguen estando ahí. Sin embargo, lo sencillo de su manejo con mando, el buen uso del sistema de pistas, y los modos gráficos disponibles en la versión analizada de PS5 lo hacen un título a tener en cuenta dentro del panorama actual.
MXGP 2021 es un híbrido interesante que aúna bajo una misma propuesta la conducción más arcade con la simulación dentro de un deporte complejo de reproducir a los mandos. Sin embargo, su sistema de físicas es capaz de lo mejor y de lo peor al mismo tiempo, contando con una serie de modos de juego que están estancados en el pasado.
Este twin stick shooter de ambientación futurista nos invita a tomar partido en unas batallas bastante vibrantes contra unos alienígenas sedientos de sangre. Unos combates que si bien de primeras resultan vistosos y sugerentes, pierden frescura e interés rápidamente debido a dos factores principales: su invariabilidad y las constantes ralentizaciones.